Trainspotting - Danny Boyle (1996)

Otra gran película que he visto estos días, entre mi asombro ("¿cómo diablos puede ser tan buena?") y mi cabreo ("¿cómo cojones no la habré visto antes?").

A la primera pregunta, hay varias contestaciones posibles y quizás, la más acertada es, que las grandes películas de nuestros tiempos están basadas en grandes libros, pero también , admitámoslo, los grandes fiascos. Así pues, benditos (¿oh dios mio, donde está mi ateísmo?) sean los guionistas que saben hacer buenas adaptaciones y de paso, bendito sea el buen cine inglés, lo europeo y un montón de clichés más que se le quedan pequeños a tamaña obra (¿de verdad que alguien aún confía en los Oscar?).

A la segunda cuestión, me temo que sólo hay una respuesta, y es que por los tiempos en los que la cinta de Danny Boyle fue estrenada, la menda contaba tan sólo ocho añitos... Supongo que era demasiado pequeña como para entender que esta historia es pura filosofía underground.

¿Tópico? sí, ¿y qué?, en este caso, la propia definición del mismo,se incluye en la cinta:
"¿Quiéres saber lo que es un chute? coge el mejor orgasmo que hayas tenido, multiplicálo por mil... y ni te acercarás".

Pues eso mismo, Trainspotting es algo así, pero sin heroína de por medio, sólo vitalismo de subsuelo y cine, cine del bueno.




Elige tu futuro. Elige la vida... ¿pero por qué iba yo a querer hacer algo así? Yo elegí no elegir la vida: elegí otra cosa. ¿Y las razones? No hay razones. ¿Quién necesita razones cuando tienes heroína?"