Los accidentes no son casuística, simplemente ocurren. Y es por eso, que todo lo que pasa una y otra vez no es un accidente, pero tampoco, como ya he dado a entender premeditamente, es fruto del azar. Todos sabemos que cuando dos placas tectónicas chocan emerge un epicentro que lo devasta todo. Y que la mariposa que orienta las alas en Berlín, levanta los vuelos en Nápoles.
Es así que creo, que el deseo sigue siendo pensaros el uno al otro, el otro al uno y desearos de nuevo una vez más, justo cuando vuestros respectivos deseos colisionan; sobre las sábanas del día a día que se os enredan en cuanto se trata de PENSAR ( y no de desear-os).
Los accidentes no son casuística, son la proteína que sintetiza el brillo de vuestros ojos, que no se encuentran nunca cuando el público de pronto les aplaude.
(Y el anfiteatro, callado y voraz, se os antoja verdad y miedo a partes iguales.)
http://www.youtube.com/watch?v=ac3HkriqdGQ
(Lifehouse-You & me)
me encanta :)
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